En el artículo "Le cayeron 3 suspensos en la 2ª evaluación"
apuntábamos algunas ideas que podrían responder a la pregunta que abre este
nuevo artículo. En él, sobre todo, proponíamos establecer un diálogo franco,
honesto con nuestros hijos cuando ya han caído algunas "calabazas";
era y es un diálogo que también se puede tener ahora mismo, cuando todavía
estamos arrancando pero ya cogiendo velocidad en este nuevo curso escolar.
Puesto que el éxito de nuestros hijos en los estudios no se produce por
arte de magia sino que entran en juego todos los elementos que lo pueden dificultar y también fortalecer... es conveniente que los tengamos
en cuenta desde el primer momento. Y... ¿qué elementos son ésos?; podríamos
resumirlos en estos cuatro:
- Motivación de nuestros hijos de
cara a su trabajo académico.
- Los apoyos que les podamos
brindar los padres y madres.
- La orientación que el
profesorado pueda aportarnos.
- El esfuerzo y la adecuada
organización de nuestros hijos para alcanzar sus metas.
Motivación.
Es el primero y principal factor. Nuestros hijos necesitan saber "para
qué estudian", qué quieren conseguir con su trabajo académico, qué
beneficios les aportará su esfuerzo.
Para ello necesitamos:
- Sentarnos con ellos con sosiego
y dialogar sobre su trabajo: el estudio, los motivos que ellos hallan
para estudiar, trabajar las áreas académicas, tengan o no sus
preferencias, los efectos que ese esfuerzo producirá en ellos.
- Pensar en los medios que vamos
a necesitar: espacio físico, tiempos específicos a lo largo de la semana,
materiales escolares,... y organizar esto juntos.
- Demostrar interés por lo que ya
están haciendo: preguntarles por lo que van haciendo cada día en el cole,
alegrarse con sus alegrías por un buen resultado y revisar aquellos malos
resultados que se puedan producir -no para echar la bulla sino para
analizar las causas juntos y animar a probar otras maneras de hacer para
que el resultado pueda cambiar-.
- Incentivar y reforzar
constantemente su esfuerzo, su actitud de mejorar,... todo aquello que
beneficie su interés por los estudios.
- Fomentar siempre y en todo caso
su autoestima y confianza en sí mismos: haciendo hincapié en aquello
que son capaces de hacer de manera autónoma y les aporta satisfacción.
("¿Viste?, lo hiciste tú solo, tú te organizaste la tarea, la
realizaste como tú sabes que hay que hacer y... mira tú cómo conseguiste
lo que querías lograr; ¡enhorabuena! por tu forma de organizar tu
trabajo"). Evitar siempre y en todo caso también el poner
calificativos dirigidos a la persona, máxime si son negativos:
"perezoso, vago, desordenado, desastre,..." que en lugar de
animar a lo que conducen es a convencerse a sí mismos de que son así y,
por lo tanto, ¿para qué esforzarse en mejorar?.

Nuestro apoyo.
Aparte de lo citado anteriormente, existen una serie de elementos
exteriores a nuestros hijos que pueden ayudar al éxito de sus estudios:
- Contar con un espacio físico
que tienda a ser siempre el mismo y en el que se sientan cómodos y en el
que puedan centrarse en su labor.
- Este espacio físico sea
relativamente amplio o con sensación de amplitud,limpio, ordenado, bien
iluminado (si es con luz natural mejor que artificial) y ventilado -no
ventoso-.
- Estructura horaria constante, de manera que el estudio o trabajo académico en casa pueda
adquirir su rutina, se pueda convertir en hábito con mayor facilidad.
- Este horario se adecuará
siempre a las necesidades de su trabajo académico y también a la organización
familiar; es decir, para que sea realista debe tener en cuenta las
actividades familiares o planes semanales que tengamos toda la familia.
Quienes deben crear este horario son nuestros hijos pero con nuestra
participación de manera que logremos ese realismo en su planificación.
- Favorecer los medios didácticos
necesarios: libros de texto, libretas, útiles de escribir y pintar, textos
de consulta, etc...
- Evitar en todo lo posible
ruidos, voces,... todo aquello que lleve a la desconcentración.

Orientación profesional.
Nos la pueden dar los tutores y profesores de nuestros hijos: contactemos
con ellos, compartamos nuestras distintas perspectivas sobre nuestros hijos y
alumnos suyos, busquemos juntos las maneras más adecuadas de apoyar los
estudios de nuestros hijos, intervenir adecuadamente en todo el proceso de
enseñanza-aprendizaje y abordar en equipo las posibles dificultades con que nos
vayamos encontrando en ese camino de acompañamiento de nuestros hijos.
Esfuerzo y organización.
Son en primer lugar responsabilidad de nuestros hijos; nosotros podemos
apoyar, ayudar, orientar,... a veces llevando a los hijos en volandas... pero
en una educación en la que buscamos que nuestros hijos crezcan en autonomía y
responsabilidad... es necesario ayudarles a que tomen conciencia de que
"no todo es cuestión de apetencia o capricho, sino que entran en juego:
- La voluntad personal,
- la pedagogía del esfuerzo,
- la constancia en ese empeño y
- una organización tal que les
permita responder adecuadamente a todos los retos que se les puedan
presentar a lo largo de todo el curso".
PARA LA REFLEXIÓN EN FAMILIA:
- ¿Tienen nuestros hijos interés
por su trabajo académico?; si la respuesta fuese negativa ¿a qué creemos
que se debe su desmotivación?, ¿cómo podríamos hacer para ayudar a cambiar
esta actitud?.
- ¿Disponen de un espacio físico
adecuado para poder realizar a diario su trabajo académico cuando han
vuelto a casa?. ¿En qué y cómo podría mejorar ese espacio físico?, ¿cómo
lo podríamos hacer?.
- ¿Cuentan con un horario
orientativo, diario, que facilite la adquisición de los hábitos de
estudio, buen rendimiento y resultados adecuados a su esfuerzo?, ¿cómo
mejorarlo?.
- ¿Hay una relación fluida con el
profesorado de nuestros hijos que nos permita aumentar nuestra seguridad
en que estamos acompañando adecuadamente a nuestros hijos en su formación
académica?, ¿en qué podría mejorar esta relación?, ¿cómo conseguirlo?.
- ¿Cómo ayudar a nuestros hijos
en los estudios?.
- ¿Cómo ayudar a nuestros hijos
a ser más organizados?.
- ¿Cómo sacar adelante los
estudios?.
- Disposición ante los estudios.
- Potenciar nuestras facultades
para el estudio.
- Instrumentos de trabajo.
- Y ahora... ¡a estudiar!.
- Proceso de ponerse a estudiar.
- Cómo asimilar y retener los
datos.
- Condiciones para el estudio.
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